Para empezar debo decir que no es una tarea fácil escapar a la sobreinformación en este curso. Me siento incapaz de llegar a todo y, por lo que he podido leer, no soy la única. Si no es fácil para los nativos digitales saber filtrar la información, ¿qué será de los inmigrantes digitales como yo?¿cómo haremos para poder enseñarlo a nuestro alumnado? Personalmente, mi problema no es desconectar, aunque a veces los míos, los de casa, me digan que "estoy enganchada" porque tal vez empiezan a verme delante del portátil o la Tablet más tiempo del que me correspondería, siempre según su criterio, por la generación a la que pertenezco. El caso es que empiezo a sufrir la sobreinformación, pero es que ¡todo es tan interesante!¡hay tanto que aprender sólo con hacer clic! Pero las limitaciones, como en otras facetas de la vida, ha de ponerlas el sentido común.
Ciertamente estoy muy satisfecha de haberme matriculado en este curso. Las herramientas que se nos van proponiendo van a ser sin duda de gran ayuda para mí, pero (tal vez es cosa de la edad), necesito un tiempo para hacerme con ellas y hacerlas mis amigas. Si, cuando conocí Dropbox vi el cielo abierto, Diigo me ha parecido algo fantástico pues mis favoritos ya no cabían en 20 pantallas ¡y eso que, desde que "pineo" lo llevo algo mejor! Con Netvibes aún no hay química, de momento me quedo con Symbaloo, tan colorido él y tan guapo.
Seguramente mi reflexión no parezca muy profunda, no pretende serlo. Antes hablaba de sentido común y el mío me dice que vaya despacio, cogiendo de aquí y allá lo que me venga bien en cada momento y lo que pueda serme útil para serlo a la vez a mi alumnado. Cuando leo las reflexiones de mis compañer@s no puedo ni imaginar cómo serán sus clases, los chicos y chicas a quienes enseñan, l@s colegas con quienes comparten grupos... Yo trabajo en primaria y soy yo misma quien filtra los contenidos poniéndoselos juntitos en el blog de aula, para que aprovechen el tiempo, para que no tengan que escribir más de lo necesario, para que puedan compartir habilidades con padres y madres que ni tan solo tienen una dirección de correo electrónico y tienen miedo a la Red. Creo que no están aún infoxicados pero, como más vale prevenir que curar, ahora que ya saben dónde están los marcadores (con las páginas que la maestra ha tenido a bien seleccionar), Symbaloo me parece una buena herramienta para que empiecen a ser autónomos y elijan por sí mismos y para la comunidad; espero que no necesite registro para alumn@s porque ese es otro problema cuando se trabaja con menores.